Las dos caras de Armani en Argentina
Foto: Associated Press

Belo Horizonte, Brasil.- Franco Armani no ha sido inmune al virus que afecta a los jugadores de Argentina.

El arquero de River Plate, pilar del campeón vigente de la Copa Libertadores, se ha vuelto uno terrenal en el arco de la selección. Por ello el dedo en la boca en señal de silencio a sus detractores, luego de atajar un penal el miércoles que dejó 1-1 el marcador contra Paraguay y le permitió a la Albiceleste mantener vivas sus chances de clasificar a los cuartos de final de la Copa América.

“Confiamos en él, aunque atajó un penal y nos dio la posibilidad de salir vivos. Celebro que haya tenido una gran actuación”, destacó su entrenador Lionel Scaloni.

Al arquero se le reclamaba una actuación consagratoria en el seleccionado, obviando que él también es víctima de la crisis de juego que embarga al equipo desde hace un tiempo.

No había tenido responsabilidad en los dos goles en el debut ante Colombia en Brasil, pero como en River ataja imposibles se le reclamó que no ofreciera mayor resistencia.

En la primera pelota que le pateó Paraguay — un derechazo de Richard Sánchez — tuvo que buscarla dentro del arco. Poco después zafó de la expulsión cuando salió fuera del área para cortar un pelotazo y se llevó puesto a Derlis González, lo que le valió una amarilla cuestionada por los guaraníes.

El ex arquero del Atlético Nacional de Colombia no es un dúctil con los pies, más bien su fuerte es el área chica. Por ello muchas veces cuando sus compañeros argentinos buscaron la descarga en la salida, terminó mandando la pelota afuera o entregándosela a un rival.

Pero luego salvó a la Argentina de la catástrofe al contenerle el penal a González.

"Obviamente lo teníamos estudiado al pateador, gracias a Dios pude atajar el penal", comentó sobre la ejecución. Es el primer penal que ataja en siete partidos con Argentina desde que agarró la titularidad en el Mundial de Rusia 2018.

"Mejoramos”, opinó Armani tras el partido. “Lo vi mejor al equipo a lo que fue el primer partido, fuimos más precisos y generamos ocasiones de gol. No quiso entrar. Pero hay que seguir, todavía con la fe y esperanza de clasificar".

La aparición de Armani es probablemente la mejor noticia para una Argentina que se jugará las ropas ante Qatar el domingo para seguir en la Copa América.

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