Ciudad Juárez.- San Luis sigue sin ganar, se hunde en la tabla porcentual y su situación se puso muy brava. Los potosinos ya preparan la cartera para pagar 120 millones de pesos y es que anoche sucumbieron ante un efectivo Juárez, que sigue con el sueño de salvarse del pago.
Si Atlas vence, serán ocho puntos de diferencia con nueve por jugarse, así su multa parece un hecho. 2-1 final.
En la Frontera se encontraron dos equipos urgidos y sotaneros, uno de la clasificación general y otro de la tabla del cociente.
Bravos y potosinos protagonizaron un duelo lleno de morbo, de muchos millones de dólares, pero no por sus plantillas, sino por la lucha directa en el porcentaje y las famosas multas.
Eso creó un juego bastante intenso desde el inicio. El local sabía que tenía que aprovechar su localía, con esa presión, Juárez comenzó con el dominio.
Darío Lezcano fue el hombre que más buscó herir a los colchoneros. Sin embargo, el delantero se mostró ansioso de romper su mala racha y no supo definir el par de oportunidades que tuvo.
San Luis no se sintió cómodo en el recinto San Benito. La visita no construyó, apostó por balones largos, pero estuvieron muy lejos de la generación de peligro. Germán Berterame, Damián Batallini y el goleador Nicolás Ibáñez pasaron desapercibidos.
Del otro lado, hubo insistencia, no un gran juego, pero sí más propuesta. Así llegó el primero. Federico Acevedo trastabilló al Caco García. El árbitro no dudó y marcó penalti.
Todos los jugadores de Bravos voltearon a ver a Lezcano. El antecedente de dos disparos fallidos desde los once pasos creó confusión, pero el paraguayo no rehuyó de su responsabilidad y con temple, la puso en el fondo. Así se sacó la espina, marcó su quinto gol del torneo y rompió con 286 minutos sin que su equipo marcara anotación.
En el complemento se respiró tensión. San Luis buscó el empate, pero cuando más cerca se vio su anotación, llegó Francisco Contreras para frenar su ímpetu.
En el último tramo, la peor defensa del torneo no podía irse en cero. El portero Iván Vázquez cometió una falta en el área, misma que Nicolás Ibáñez cambió por el descuento desde el manchón.
No fue suficiente. San Luis se hunde, Bravos quiere salvarse, todo es posible.
