San Luis.- Los Bravos de Ciudad Juárez tuvieron que irse hasta los penales para vencer al Saint Louis City para amarrar el liderato de su grupo en la Leagues Cup.
No la meten
Caía el sol en Saint Louis y la grada del City Park se empezaba a llenar. Así arrancaban las hostilidades entre los Bravos de Ciudad Juárez y el Saint Louis City Soccer Club.
No había cambios en el once fronterizo y Jairo Torres era el primero que tocaba la bola con intención de crear ofensiva por un costado de la cancha.
Poco duraba la calma por que el cuadro local madrugaba a Moisés Mosquera, desbordaba hasta la raya y ya obligaba a Sebastián Jurado a que moviera las manos que Dios le dio. Indiana Vassilev ponía un balón a la olla pero terminaba retumbando en la cabeza de Francisco Calvo.
Casi un cuarto de hora transcurrido y la cosa era de área a área. Aitor García paseaba como Pedro por su casa por la banda izquierda y se quedaba a nada de conectar el centro con Ángel Saldívar. No obstante, la mano de Benjamin Lundt resultaba salvadora.
El ex tiburón de Veracruz sacaba una de gol con el pie y del otro lado de la cancha Lundt hacía lo propio escupiendo un remate de Ralph Orquín. Todo movidito, todo muy activo en las tierras de Gateway Arch.
Cumplíamos media hora de compromiso y los caballos ya eran dueños de la posesión, circulando sin problema en terreno enemigo. No obstante, los de rojo hacían gala de la buena defensa (a fin de cuentas llena de alemanes), para detener los embates verdes. Aitor García pegaba un riflazo para las manos del arquero de Saint Louis que seguía intratable.
El conjunto americano, por su parte, tenían 30 segundos de genialidad, pero no de tino. Cedric Teuchert y Simon Bechert burlaban a todos menos a Jurado. El luminoso seguía igual que como empezamos. Nada para nadie.
Faltaban 10 minutos para el descanso y la balanza se destanteaba. El cuadro de la MLS agarraba confianza y aprovechaba el acostumbrado descontrol de Mosquera que de repente se perdía en el sector de atrás.
A nada estábamos del entretiempo y Ángel Saldívar lo volvía a intentar sin éxito alguno. Kyle Hiebert le desviaba el trallazo para salvar el arco. Así nos íbamos al medio tiempo: 0-0 nada para nadie.
Como los Cadetes….
Ni 30 segundos teníamos de tiempo complementario y Saint Louis ya tenía la pelota parada. Eduard Löwen le pegaba sólido al tiro libre pero pasaba la bola por arriba del marco local.
Lo que era libre tránsito se volvía un embotellamiento. Embotellamiento como si fuera la Avenida de la Raza a las 5:00 de la tarde. Todos se tendían la pierna y todos se interponían en el camino del otro. Vassilev era el único con espacia, mandaba un centro que topaba con el zapato de Mosquera. Este último se iba con el impulso y pegaba de lleno con el poste.
Ya levantado el colombiano le correspondía un córner a los locales. Estos pusieron el centro para que Becher la resolviera de aire, de parte interna y sin ángulo para abrir el marcador. 1-0 al 57 y con una pintura de gol.
Nada le duró el gusto a los dueños de la casa por que a eso del 61 Dieter Villalpando cruzaba un balón que le llegó rebotado de un cabezazo. El palo no salvó al guardameta de Misuri y el electrónico estaba igualado 1-1.
Nos separaban 20 minutos para llegar a los penales y Jurado seguía en plan grande para retener a la localía. Lo que fallaba era el medio sector. Diego Campillo y compañía no podían mover bien la de gajos, tocaban y retocaban pero no generaban peligro.
Al 75 Jairo Torres volvía a tocar la puerta con hasta alegría, por lo menos hasta que Lundt descolgó el disparo y le negó la anotación. Totalmente sofocado el cuadro de Jack Hackworth ante un Juárez que todavía no sabía cómo entrarle a un portero que estaba convertido en una pared.
Minutos más tarde sucedía algo casi inédito: Aitor García salía de la cancha y en su lugar entraba Diego Valoyes. Quedaba ver si le respondían las piernas tras casi un año de ausencia.
Entretanto, con 10 minutos por jugar Akil Watts tenía el gol de gane, ya lo había gritado. Sin embargo, para desconsuelo del entarimado, le había pegado a la red….Por afuera.
No se acababa el tiempo reglamentario sin un susto. A Valoyes si le respondían las piernas para volar la bola y perderse el gol. Aquí todo seguía igual como dijeron los Cadetes de Linares. 1-1 el marcador y nos íbamos a definir en los penales.
Desde el manchón
Hurtado era el valiente y el primero en apuntarse para cobrar. Tiraba a su izquierda, Lundt metía la mano pero no lo paraba. 1-0 el asunto. Cedric Teuchert quiso hacer lo mismo pero Jurado sí se la tapaba.
Francisco Calvo no tomaba carrera ni tampoco tenía miedo. Otra vez a la izquierda y a media distancia. Se le doblaban las manitas y el marcador era de 2-0. Esto por lo menos hasta que Saint Louis anotó su respectivo penal.
El especialista Saldívar no hacía otra cosa más que reventar el arco en el mero centro para el 3-1. Jurado por su parte repetía la parada y Juárez estaba a un gol de llevarse la victoria.
Este no podía ser ¿Por qué? Por qué Jaret Ortega pateaba el peor penal de su vida. Para su suerte la pena máxima se repetía y el de arriba le daba chance de sacudirse la vergüenza.
No se quiso equivocar y de plano desgarró la portería para el último gol. 4-1 la tanda, ganaba Juárez.