Ciudad Juárez.- El Día Internacional del Vendedor Ambulante se celebra cada 14 de noviembre, fecha que busca reconocer y honrar el arduo trabajo de los vendedores ambulantes en todo el mundo, quienes desempeñan un papel crucial en la economía informal, estos trabajadores independientes venden productos en las calles, mercados y espacios públicos, proporcionando bienes y servicios esenciales a sus comunidades.
Desde las calles de México hasta los rincones más remotos del planeta, los vendedores ambulantes ofrecen productos únicos y sorprendentes, son una parte integral de la economía informal en muchas ciudades alrededor del mundo. Estos comerciantes, que operan fuera del marco regulado de la economía formal, ofrecen una variedad de productos y servicios que van desde alimentos y ropa hasta artículos más inusuales.
Los vendedores ambulantes son esenciales para las economías urbanas, especialmente en países en desarrollo. En México, se estima que hay más de un millón de vendedores ambulantes. Estos comerciantes proporcionan acceso a bienes y servicios a precios asequibles, lo que es crucial para las personas de bajos ingresos. Además, crean empleos no solo para ellos mismos, sino también para otros trabajadores informales como cargadores, guardias de seguridad y transportistas.
A nivel mundial, la venta ambulante es una fuente vital de ingresos para millones de persona, en países como India, se estima que hay cerca de diez millones de vendedores ambulantes. Estos comerciantes no solo contribuyen a la economía local, sino que también juegan un papel importante en la vida social y cultural de las ciudades, sus puestos de venta añaden vitalidad y dinamismo a los espacios públicos, convirtiéndose en puntos de encuentro y socialización para la comunidad.
A pesar de su importancia, los vendedores ambulantes enfrentan numerosos desafíos, la falta de regulación y protección legal los deja vulnerables a la explotación, el acoso policial y los desalojos forzosos, además, la competencia feroz y la inestabilidad económica pueden hacer que sus ingresos sean impredecibles.
Sin embargo, muchos vendedores ambulantes prefieren permanecer en la informalidad debido a las ventajas no económicas que ofrece, la autonomía, la flexibilidad de horarios y la posibilidad de trabajar junto a familiares son factores que valoran altamente. Estos beneficios sociales a menudo superan las desventajas económicas, lo que explica por qué muchos vendedores ambulantes optan por no formalizar sus negocios.
La creatividad y la adaptabilidad de los vendedores ambulantes a menudo los llevan a ofrecer productos únicos y sorprendentes. En México, es común encontrar vendedores ambulantes que ofrecen desde alimentos tradicionales como tamales y elotes, hasta productos más inusuales como insectos comestibles y remedios herbales.
A nivel mundial, los vendedores ambulantes también han sido conocidos por vender artículos extraños. En Tailandia, por ejemplo, es posible encontrar vendedores que ofrecen insectos fritos como grillos y escorpiones, considerados una delicia local. En las calles de Nueva York, un vendedor ambulante se hizo famoso por vender “aire enlatado” de diferentes partes de la ciudad, como Central Park y Times Square.
Uno de los productos más extraños vendidos por un vendedor ambulante fue reportado en Japón, donde un comerciante ofrecía “piedras de la suerte”. Estas piedras, supuestamente bendecidas por monjes budistas, prometían traer buena fortuna a quienes las compraran, aunque pueda parecer una broma, el vendedor logró captar la atención de muchos curiosos y turistas, demostrando que la creatividad no tiene límites en el comercio ambulante.
Celebrar este día es una oportunidad para apoyar a los vendedores ambulantes comprando sus productos y difundiendo información sobre su importante labor en nuestras ciudades.
