Bolivia.- Los partidos políticos y las autoridades del Órgano Electoral alcanzaron un acuerdo este lunes que comprometió a las fuerzas políticas en el Legislativo boliviano a garantizar las elecciones de magistrados, que estaban en riesgo tras impugnaciones legales de los postulantes, con el acuerdo, se mantiene la fecha original de elecciones para el 15 de diciembre.

La semana pasada, el Tribunal Constitucional declaró desiertas las elecciones para jueces de dos de los cuatro tribunales, en cinco de los nueve departamentos, por impugnaciones de los postulantes que quedaron fuera de carrera. Eso saltó las alarmas del Órgano Electoral y presionó a alcanzar un acuerdo político para destrabar el bloqueo. Además los vocales del Órgano Electoral alegan que, al haber un proceso de elecciones en curso, ese fallo atentaba con el proceso de preclusión, que determina que en época electoral, el máximo órgano de toma de decisiones es precisamente ese poder.

El analista político Marcelo Silva, coincide con esa visión. Dice que los magistrados del Tribunal Constitucional —que están prorrogados en sus funciones— ha “generado un conflicto de poderes” porque en época electoral, él máximo órgano de decisión es el Tribunal Electoral.

“Pero el proceso de preclusión es muy importante y ninguna fuerza, ningún otro poder pude quitarle... sino cualquier persona podría frenar una elección y no debería ser así".

La reunión del lunes fue en el Tribunal Supremo Electoral y los asistentes rechazaron “enfáticamente” la sentencia constitucional, en un documento firmado por todos. Además, respaldaron la realización de las elecciones judiciales el 15 de diciembre tras el "pleno apoyo" del vicepresidente David Choquehuanca; el presidente de la Cámara de Senadores, Andrónico Rodríguez; el presidente de la Cámara de Diputados, Omar Yujra, entre otros representantes de organizaciones políticas al Órgano Electoral.

Del partido oficialista el Movimiento Al Socialismo (MAS), asistieron los representantes de las dos facciones, tanto los partidarios del expresidente Evo Morales, como los afines al presidente Luis Arce.

Bolivia debe elegir en diciembre a los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, Tribunal Constitucional, Tribunal Agroambiental y del Consejo de la Magistratura. Los actuales están actualmente prorrogados en sus cargos desde enero.

Este no es el primer encuentro entre políticos y el Tribunal Supremo Electoral. En un primer acuerdo lograron que se presenten los postulantes a los cargos máximos del órgano judicial. Tras las pugnas, el partido de gobierno que ha perdido fuerza en el Legislativo por una fractura interna.

En Bolivia, los jueces se eligen por voto popular tras un proceso que inicia en la Asamblea Nacional, en donde se requiere una mayoría de dos tercios para aprobar una comisión que, a su vez, selecciona a los candidatos que finalmente aparecerán en la papeleta electoral.

Hace tres días el mismo Tribunal Constitucional (TC) ratificó su fallo en contra de la reelección presidencial y legislativa continúa por más de una vez, lo cual cierra la posibilidad de que Morales vuelva a postular en los comicios de 2025.

Organismos internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, han señalado la falta de independencia del poder judicial con respecto al poder político. Esto ha agudizado la crisis del sector justicia, que también se ha visto atrapado en medio de las disputas al interior del partido gobernante.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) instó al Estado boliviano a llevar a cabo las elecciones judiciales en la fecha prevista el 15 de diciembre.