Tres mujeres probablemente se infectaron de VIH mientras recibían los llamados vampire facials (tratamientos faciales vampiro) en un spa de Nuevo México, unos de los primeros casos conocidos de VIH transmitidos a través de inyecciones cosméticas, informaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés).

El primer caso fue una mujer de mediana edad que dio positivo a VIH en 2018, según los CDC. No tenía antecedentes de consumo de drogas inyectables, transfusiones de sangre recientes o contacto sexual reciente con alguien que tuviera el VIH, pero sí declaró haberse sometido a un tratamiento facial vampiro.

Las dos siguientes fueron también mujeres de mediana edad que se habían hecho tratamientos faciales vampiro en 2018. Una fue diagnosticada con la etapa más temprana del VIH en 2019, y la otra en 2023, cuando fue hospitalizada con síntomas graves.

Los CDC indicaron que el spa no tenía las licencias apropiadas para operar y no estaba utilizando las medidas de seguridad adecuadas.

Una investigación conjunta de los CDC y el Departamento de Salud de Nuevo México encontró un estante de tubos de sangre sin etiquetar en un mostrador de la cocina del establecimiento, así como en el refrigerador de la cocina, junto a alimentos y productos inyectables como la lidocaína. Los investigadores también descubrieron jeringuillas sin envolver en cajones, mesetas y cestos para papeles.

El propietario del balneario se declaró culpable en 2022 de cinco delitos graves por practicar la medicina sin licencia, informó el año pasado el departamento de salud. La cadena KOB de Albuquerque, afiliada a la NBC, informó en 2022 de que el propietario había sido condenado a 3 años y medio de prisión.

Los investigadores de los CDC y del departamento de salud determinaron finalmente que 59 clientes del spa podrían haber estado expuestos al VIH.