Ciudad Juárez.- Los Bravos de Ciudad Juárez le dijeron adiós a su director técnico Mauricio Barbieri ayer martes. La salida de su ahora exentrenador no deja más que otro despido en la larga lista del banquillo fronterizo y los números de un equipo que sigue sin levantar en primera división.

El brasileño hizo acto de presencia en las tierras de Juan Gabriel a principios de este año para reemplazar al también corrido Diego Mejía. Asumió el rol en la banca en febrero y alcanzó a salvar un torneo que pintaba para desastroso (por razones dentro y fuera de la cancha) con tres victorias en los últimos cuatro partidos del torneo pasado.

Era todo color de rosa hasta que se apareció el presente certamen y el Bravos del ímpetu se empezaba desdibujar. Atlas les empató en la primera jornada mientras que Toluca, Pumas y el América le pasaron por encima con relativa facilidad. Fue después de este último encuentro cuando los cimientos, que ya de por sí eran flojos, se empezaron a cuartear con el primer “dardo” del brasileño hacia su directiva.

No había refuerzos

Parte del coraje del brasileño tuvo su razón de ser en la tardanza de los directivos fronterizos para cerrar los refuerzos que le habían prometido para darle profundidad a un muy limitado plantel que no tenía ni piernas ni condición para afrontar un torneo que venía con todo y Leagues Cup.

“Hasta ahora la directiva ha fallado totalmente en traer los refuerzos que me prometió. Estamos haciendo lo mucho que podemos con las condiciones que tenemos. Pero no le puedes decir nada a jugadores que vienen de jugar 90 minutos. No les puedes pedir más, no les puedes reprochar”, expresaba el brasileño al término del partido contra las Águilas.

A estos mismos Bravos, cansados y por demás jugados se les cruzó la Leagues Cup, mismas que acabó sirviendo para intentar recomponer el camino y para ganarle tiempo a la falta de elementos.

Juárez terminó saliendo cepillado por el Colorado Rapids en la misma ronda del año pasado: la de 16vos de final. De frente tenían por afrontar el resto del torneo con dos refuerzos, Guillerme Castilho y un nueve nominal en Óscar Estupiñán.

Para arriba, para abajo y el último de los corajes

El regreso a tierras mexicanas pegó duro con la goleada de las Chivas Rayadas de Guadalajara y los errores que costaron un punto ante los Rayados de Monterrey. No obstante, todo parecía en calma gracias a tres triunfos ante Mazatlán, el Puebla y Santos Laguna. Había vida e inclusive posibilidades de repechaje.

Esto hasta que el Cruz Azul se encargó de exhibir de cabo a rabo a un caballo que no supo maquinar ni hilvanar tres pases seguidos en la goleada de 4-0. La derrota en tiempo de compensación ante León y el desastre tunero fueron la gota que derramó el vaso. El último reniego del carioca fue el que acabó con la paciencia de Fran Sánchez y compañía, costándole el trabajo.

“Exigir que este equipo de resultados a corto plazo no sería coherente. Si hay intención de continuar con un proyecto a futuro yo tengo todas las intenciones de continuar. En este momento nadie se ha acercado a mí, ni me han dicho nada. Yo voy a seguir haciendo mi trabajo. Yo escuchó, pero tienen que cambiar las cosas, no entregaron lo que prometieron, el que respondió fui yo”, remató Barbieri después de su última derrota del domingo.

¿Quién sigue?

De buenas a primeras el encomendado para acabar el semestre es Salvador Valero, entrenador de la Sub-23. Sin embargo, recién cortada otra cabeza más en Juárez, el primero que suena para tomar el banquillo el próximo torneo es el ex capataz de Santos y Tigres: Robert Dante Siboldi.

La era Barbiri en número

Juegos jugados: 25

Juegos ganados: 6

Juegos empatados: 3

Juegos Perdidos: 16

Goles a favor: 37 Goles en contra: 50 Diferencia de goles -13

PORCENTAJE DE EFECTIVIDAD: 24 por ciento