La tasa de natalidad en Estados Unidos se mantuvo estable el año pasado, ya que nacieron menos bebés que antes de la pandemia, informaron este jueves los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Los nacimientos de madres de 35 años o más siguieron aumentando, y las tasas en este grupo de edad alcanzaron sus niveles más altos desde la década de 1960. Sin embargo, según los CDC (por sus siglas en inglés), estos incrementos se vieron contrarrestados por tasas de natalidad históricamente bajas entre las madres adolescentes y veinteañeras. El informe se basa en una revisión de más del 99 por ciento de las actas de nacimiento expedidas el año pasado.
El año pasado nacieron en Estados Unidos poco menos de 3.7 millones de bebés, unos 3 mil menos que el año anterior. Como las cifras son provisionales y el cambio fue pequeño, las autoridades consideran que los nacimientos se mantuvieron “más o menos al mismo nivel que el año pasado”, indicó Brady Hamilton, de los CDC y autor principal del informe.
Los nacimientos en Estados Unidos estuvieron disminuyendo durante más de una década antes de la pandemia de covid-19, y cayeron un enorme 4 por ciento de 2019 a 2020. Subieron alrededor del 1 por ciento en 2021, un aumento que los expertos atribuyeron a los embarazos que las parejas habían pospuesto durante los primeros días de la pandemia.
Más conclusiones del informe:
-Las tasas de natalidad más elevadas siguen registrándose entre las mujeres de treinta y pocos años. El número de nacimientos de mujeres de esa edad se mantuvo básicamente igual que el año anterior. Los nacimientos descendieron ligeramente entre las mujeres de veintitantos años, que tienen la segunda tasa de natalidad más alta.
-Los nacimientos de madres hispanas aumentaron un 6 por ciento el año pasado y superaron el 25 por ciento del total nacional. Los partos de madres de raza blanca descendieron un 3 por ciento, pero siguieron representando el 50 por ciento de los nacimientos. Los nacimientos de madres de raza negra cayeron un 1 por ciento, y fueron el 14 por ciento del total.
-La tasa de partos por cesárea aumentó ligeramente, hasta el 32.2 por ciento. Es la más alta desde 2014. A algunos expertos les preocupa que las cesáreas se realicen con más frecuencia de la médicamente necesaria.
-Estados Unidos fue una vez uno de los pocos países desarrollados con una tasa de fertilidad que aseguraba que cada generación tuviera suficientes hijos para reemplazarse a sí misma: alrededor de 2,1 hijos por mujer. Pero ha ido bajando, y en 2020 cayó a cerca de 1,6, la tasa más baja registrada. Subió ligeramente en 2021, hasta casi 1,7, y se mantuvo así el año pasado.
Se esperan cifras más completas y detalladas de 2022 en los próximos meses. Esos datos deberían ofrecer una mejor comprensión de lo ocurrido en los distintos estados y entre los diferentes grupos raciales y étnicos, dijo Hamilton.
También podría mostrar si los nacimientos se vieron afectados por la decisión de la Corte Suprema del país emitida el pasado junio que anuló el fallo del caso Roe contra Wade, que permitió a los estados prohibir o restringir el aborto. Los expertos calculan que casi la mitad de los embarazos no son deseados, por lo que las limitaciones al acceso al aborto podrían afectar al número de nacimientos.
Si estas restricciones están afectando a los nacimientos, no resulta evidente en los datos nacionales publicados el jueves.
Es posible que las restricciones al aborto provoquen un aumento de las tasas de natalidad en 2023, muy probablemente en mayor medida entre las mujeres más jóvenes que entre las madres de mayor edad, señaló Ushma Upadhyay, investigadora de salud reproductiva de la Universidad de California en San Francisco. Pero incluso si se produce un aumento, es posible que la nación no recupere los niveles de natalidad anteriores a la pandemia, dadas otras tendencias, añadió.
“No sé si volveremos a esa situación”, afirmó Upadhyay.