Ciudad Juárez.– Un gran escándalo es el que ha estado viviendo toda la familia Guzmán después de que tras meses de espera por fin se reveló la verdad sobre si Luis Enrique Guzmán era o no el padre biológico del pequeño Apolo, el niño que supuestamente procreó a lado de Mayela Laguna.

Tras las largas por las pruebas de ADN, ayer Laguna reconoció que la prueba salió negativa, por lo que el pequeño no es biológicamente parte de la dinastía de los Guzmán.

El hijo de Silvia Pinal respondió a estos cuestionamientos y dejó en claro cuál será el procedimiento que tendrá que llevarse a cabo ahora que se dieron a conocer los resultados negativos en compatibilidad molecular. Fue durante un encuentro con los medios de comunicación, donde Luis Enrique Guzmán señaló que estaba desanimado por no resultar el progenitor del menor.

“Ya lo sabía, pero la verdad no es algo agradable. Lo que me da tranquilidad es que el niño está bien, está con la familia y está bien cuidado y querido. Estoy triste porque yo amo mucho a Apolo y es difícil. Creció conmigo tres años y medio y completamente adorado por mi familia”, puntualizó.

Respecto al proceso legal, el integrante de la dinastía Pinal ahondó en que aún quedaban algunos pasos que cumplir.

“Puede ser que (Mayela) tenga un poder de convencimiento, pero es muy triste que en medio quede el niño. Habrá una segunda audiencia y ahí se presentarán pruebas y testimonios y decidirá el juez (...) La demanda es desconocimiento de la paternidad, al juez lo único que le importa es si soy el papá o no. Al dictar el juez se le quita el apellido y yo quedo deslindado de responsabilidades como padre biológico, que no soy”, detalló.