Seúl.- La Corte Constitucional de Corea del Sur destituyó al presidente Yoon Suk Yeol tras su juicio político, cuatro meses después de que él convulsionara la política surcoreana al declarar la ley marcial y enviar soldados al Parlamento en un fallido intento por destrabar un estancamiento legislativo.

El veredicto unánime se emite más de tres meses después de que la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, votara a favor de someterlo a juicio político. Ahora Corea del Sur debe llevar a cabo elecciones nacionales en un plazo de dos meses para elegir un nuevo presidente. Las encuestas muestran que Lee Jae-myung, líder del Partido Demócrata —el principal partido liberal de oposición— es ahora el favorito para convertirse en el próximo mandatario del país.

En un veredicto televisado a nivel nacional, el presidente interino de la corte, Moon Hyung-bae, declaró que el tribunal de ocho miembros ratificó el juicio político a Yoon porque su decreto de ley marcial violaba gravemente la Constitución y otras leyes.

“Dado el grave impacto negativo en el orden constitucional, y las significativas repercusiones de las transgresiones del acusado, consideramos que los beneficios de defender la Constitución al destituir al demandado superan con creces las pérdidas nacionales derivadas de la destitución de un presidente”, declaró Moon.

Yoon no respondió de momento al veredicto, pero su partido gobernante, el Partido del Poder Popular, indicó que aceptaría la decisión.

En una manifestación anti-Yoon cerca del antiguo palacio real en el centro de Seúl, la gente estalló en lágrimas de júbilo y bailes cuando se anunció el veredicto. Dos mujeres lloraron mientras se abrazaban y un anciano cerca de ellas se levantó de un salto y gritó de alegría.

La declaración de ley marcial por parte de Yoon y su posterior juicio político sumieron al país en un caos, en el que millones de personas salieron a las calles para denunciarlo o apoyarlo. Muchos expertos dicen que es probable que los seguidores de Yoon intensifiquen sus manifestaciones tras la decisión de la corte, prolongando la división nacional.

Después de declarar abruptamente la ley marcial el 3 de diciembre, Yoon envió cientos de soldados y policías a la Asamblea Nacional. Ha argumentado que buscaba mantener el orden, pero algunos altos oficiales militares y de policía enviados allí han declarado en audiencias e investigaciones que Yoon les ordenó sacar a los legisladores para evitar que la asamblea votara sobre su decreto.

A la larga, suficientes legisladores lograron entrar y votaron unánimemente para anular el decreto de Yoon.

La Asamblea Nacional votó para enjuiciar políticamente a Yoon el 14 de diciembre, acusándolo de violar la Constitución y otras leyes al suprimir las actividades de la Asamblea, intentar detener a políticos y socavar la paz en todo el país.