La pugna entre dos fracciones del Cártel de Sinaloa sigue teniendo a esta ciudad bajo fuego, cuyo saldo de los hechos violentos de ayer suman 10 personas muertas y otras más heridas.

Ante la violencia, la Sedena envió 600 elementos para inhibir los hechos que se han estado registrando desde hace dos semanas en Sinaloa.

Las autoridades señalaron que estos efectivos trabajarán estrechamente con las autoridades locales, para reducir los índices delictivos.

La violencia continua suscitada desde el pasado 9 de este mes ha dejado 73 personas y dos militares muertos.

Un tiroteo ocurrido ayer entre civiles armados y autoridades en el Desarrollo Urbano Tres Ríos, dejó un saldo de tres muertos, un detenido y dos militares heridos.

Autoridades confirmaron que elementos de la policía municipal se encontraban realizaron un recorrido por la zona, donde se ubica la mayoría de restaurantes, plazas y centros comerciales de la ciudad, cuando fueron atacados por gatilleros, logrando repeler la agresión.

Los civiles armados intentaron resguardarse en unos departamentos de la zona, donde fueron acorralados por las autoridades municipales, con ayuda de las Fuerzas Armadas.

Del lugar fueron desalojados seis adultos y un menor debido a que los uniformados ingresaron para intentar detener a los agresores y nuevamente fueron baleados.

Los soldados lanzaron algunos explosivos para ingresar hasta uno de los departamentos, y así lograron inmovilizarlos, pero en el operativo, algunos fallecieron y militares resultaron heridos.

“Redujeron a tres de los civiles agresores y detuvieron a otro. Dos soldados resultaron heridos, quienes fueron trasladados a recibir atención médica”, confirmó horas más tarde el gobernador Rubén Rocha Moya.

Algunos pistoleros lograron escapar corriendo a través de una plaza comercial cercana, donde fueron perseguidos por los militares, son ser detenidos.

Otros escaparon en varios vehículos, arrojando ponchallantas en las calles de los alrededores, para evitar ser perseguidos.

Ambulancias de la Cruz Roja y de las mismas corporaciones ingresaron a la zona para atender de crisis nerviosas a los habitantes de los departamentos.

Por otra parte, a temprana hora fueron localizadas otras dos personas sin vida; una a unos metros del libramiento estatal Benito Juárez, y otro sobre un puente que atraviesa la autopista Mazatlán-Durango, en las inmediaciones de la sindicatura de Quilá.

Y por la tarde, los cuerpos de cinco personas fueron abandonados a un costado de la carretera internacional México 15, en el mismo lugar y con las mismas características que los hallados hace una semana al sur de Culiacán.

Se trata de cinco varones, algunos de ellos semidesnudos, recargados en la pared de una bodega, con signos visibles de tortura y con sombreros sobre sus cabezas, repitiendo la escena del domingo 15 de septiembre, cuando otras cinco personas fueron halladas de esa forma.

Las autoridades de los tres niveles de gobierno acudieron al sitio, cerrando la circulación de sur a norte de esta carretera, mientras realizaban las primeras diligencias.