Cuando una bicicleta blanca es subida a un poste es porque el cuerpo de una persona ciclista ha quedado inerte en el pavimento. En 2024, hasta el 24 de octubre, cuatro personas fallecieron a causa de un atropello en las calles de Ciudad Juárez.
Desde el 11 de septiembre de 2017, año que comenzó la iniciativa Bicicleta Blanca en la frontera, se han registrado 34 muertes por atropello y un feminicidio.
Sobre el perimetral Carlos Amaya, antes de la calle Nahualtecos, se observa colgada una bicicleta blanca, el primer memorial que el Colectivo Fixiebeat dejó como testimonio, como tributo a una vida y como manifestación a un muy lento avance al reconocimiento al derecho humano de la movilidad en la ciudad.
En diferentes puntos se han colgado 17 memoriales, aún faltan, mientras tanto la lucha de los activistas es que no haya mas bicicletas blancas que colgar. En eso están.
Ghost Bikes
La iniciativa Bicicleta Blanca se adoptó de “Ghost Bikes” (Bicicletas Fantasma) que comenzó el 2003 en la ciudad de St. Louis, Missouri, EUA. El tributo se multiplicó hasta llegar a más de 210 puntos en el mundo. En México, las primeras ciudades en donde se replicó el memorial fueron Ciudad de México (2009), Guadalajara (2009) y en Culiacán (2013).
El 11 septiembre de 2017, el conductor de una camioneta, a exceso de velocidad, terminó con la vida de un ciclista en el perimetral Carlos Amaya, el responsable huyó del lugar.
Este caso conmocionó a los activistas de FixieBeat, encabezados por la alcaldesa de la Bicicleta en la ciudad, Cynthia López de la Fuente. “Tenemos una cultura en manejar en exceso de velocidad, el ciclista se enfrenta a morir todos los días”, comenta la activista.
Ricardo Luna, también integrante del colectivo es el encargado de hacer estos memoriales, pintar las bicicletas de blanco y construirlas con donativos ciudadanos. “Cuando llevamos la bicicleta al punto donde la persona falleció no usamos autos”, menciona Luna. Hacen un pequeño cortejo fúnebre o procesión en honor del ciclista, una manifestación silenciosa, toman su carril en la calle y con un remolque llevan la bici blanca al punto donde murió la persona. “Los vecinos de El Paso, Texas, le llaman el silent ride, van en silencio todo el camino. Acá no hemos llegado a eso pero, lo hacemos con mucho respeto, música, tratamos de compartir algo”.
Cada memorial conserva detalles que la familia de la victima desea dejar con la bici blanca en estas ceremonias, Ricardo recuerda el caso, de un niño que se dedicaba a hacer mandados en bicicleta y que fue embestido por el conductor de una rutera (camión de transporte público). “Tuvimos contacto con los familiares, ellos fueron con nosotros. En muchos casos sí hemos podido contactar a los familiares, en otros por falta de información no”. Incluso en estas procesiones muchos parientes de los fallecidos se suman a este cortejo-protesta fúnebre.
En otra ocasión, cuando un adulto mayor fue arrollado y muerto, familiares de otras partes del país acudieron al tributo y se sumaron en bicicleta al cortejo del memorial, “creo que las personas vinieron de Querétaro, un chorro de familiares. La esposa y los hijos rodaron con nosotros hasta allá, por el Cuartel Militar. Lo recuerdo y se me pone la piel chinita, porque había muchos familiares esperando”.
Además de compartir el dolor, quieren que sea un mensaje contundente para las autoridades. “La realidad es que no lo ven con mucha seriedad, es importante que vean, aquí murió una persona porque no hay las condiciones para que los ciclistas circulemos con seguridad”.
Ser ciclistas, activistas y juarenses, los hace personas muy comprometidas, Cynthia lo define así: “Es una forma de vivir la calle de otra manera, tratamos de que sea un espacio seguro. Es mandar un mensaje: somos visibles hay personas que nos queremos mover en bicicleta y tenemos derecho a usar la calle”. Sin que les cueste la vida, es el punto de este activismo.
El mapa de los memoriales
Fixiebeat mantiene un registro puntual de las personas ciclistas fallecidas en estos siniestros desde que comenzó Bicicleta Blanca. Este mapa lo comparten en las redes sociales del colectivo y de la propia iniciativa, algunos contienen las notas periodísticas y las ubicaciones y datos generales del caso.
Entre estos memoriales solo hay una bicicleta rosa, la de Isabel Cabanillas de la Torre, una artista y feminista del colectivo: Hijas de su Maquilera Madre. Fue asesinada el 18 de enero de 2020. Ella iba en su bicicleta por el cruce de las calles Inocente Ochoa y Francisco I. Madero, en la Zona Centro, recibió varios impactos de bala en el tórax, a unos metros del último lugar que visitó, iba rumbo a su casa, pero no volvió. Tenía 26 años y un hijo de 4 años. Su caso sigue sin ser resuelto, no han arrestado a nadie por el crimen. “En el caso de Isabel Cabanillas dejamos la bici blanca y al entregarla al colectivo, ellas se encargaron de ponerla en color rosa”, comenta Luna.
Cada una de las personas que han perdido la vida por simplemente salir de casa al trabajo, a la escuela, a la tienda, por paseo, por diversión o cualquier otro motivo, el solo moverse de un punto a otro de la ciudad en bicicleta, les ha costado la vida. Cuando observamos esos 34 puntos en el mapa, son 34 personas que dejaron de existir solo por la imprudencia, en la mayoría de los casos, de conductores en exceso de velocidad, además, principalmente, la falta de infraestructura vial que impera en la ciudad.
‘Mi hijo era muy alegre’
Josué González tenía 18 años, le decían de cariño “Choche”. Era universitario, cursaba Ingeniería en Sistemas Automotrices en Ciudad Universitaria y trabajaba en un taller mecánico. En el trabajo le habían dado una bicicleta y ese era su medio de transporte. Si algo caracterizaba a Josué era su alegría, dice su madre, la señora Irma Lozoya.
Su trayecto habitual era de la casa al trabajo, de la avenida Tecnológico, desde la calle Centeno hasta la avenida De la Raza.
El 10 de diciembre de 2021, todo cambió. La rutina de la señora Irma y toda la familia era la habitual. “Yo me fui a las 6:00 am al trabajo. Mi hija le preparó el lonche”. Estaba muy contento y le presumía a su hermana que su bicicleta tuviera una campanita, “estaba muy emocionado porque traía otra bici”. Salió a las 8:00 am. El esposo de Irma le ofreció 20 pesos para la ruta, él le contestó “no pasa nada, en esta me voy”.
Muy cerca de su casa, a la altura de la calle Yucatán, entre 8:05 y 8:10, Josué fue atropellado. El novio de su hermana llegó a preguntar por él, ya que se dio cuenta de un atropello a un ciclista. “Ahí en Los Cuates (un expendio) hay un accidente”. Al llegar la hermana al lugar, el cuerpo ya se lo habían llevado. Es hasta que revisan el video del expendio que confirman que se trataba de Choche. Irma se enteró hasta las 11:00 am del fallecimiento de su hijo.
“Él era muy servicial, muy alegre, con su sonrisa siempre, yo así lo recuerdo”. Años después de la tragedia, Irma se siente muy agradecida con los activistas, quienes la contactaron al día siguiente del siniestro. “Estoy muy agradecida de que el grupo de ciclistas no se olvidan de él. Le hicieron su bicicleta blanca… yo lo que veo es que son muy unidos”. No necesitaban conocerlo, es un gesto muy bueno, “era mi hijo”.
‘No más bicis blancas’
Las bicicletas blancas son modestos memoriales para los ciclistas asesinados en las calles pero también grandes monumentos de amor y reconocimiento a esas vidas.
Son un recordatorio diario del derecho de los ciclistas para transitar seguros por cualquier vialidad de la ciudad. “La calle es de todos, toda la calle”, como grita la activista Cynthia y su colectivo en cada manifestación pacífica conocida como la Masa Crítica.
Si un día desaparecen las bicicletas blancas que no sea por falta de ciclistas sino porque la infraestructura y la cultura vial hayan avanzado de la mano de las políticas públicas para reconstruir nuestras vialidades y la movilidad, es el llamado de atención que hacen los ciclistas. “Se tienen que armonizar los reglamentos de seguridad vial, de construcción, nosotros estamos luchando porque el reglamento de Vialidad se armonice con la Ley General de Movilidad porque es algo legal que nuestras autoridades no lo han hecho”.
“Esperamos que cada año sean menos bicicletas blancas”.