Ciudad de México.- México anunció este viernes la puesta en marcha de un plan contra la mercancía de contrabando y piratería que se llevará a cabo en los 32 estados del país, incluidos puertos y aeropuertos, y que se inició la víspera con un gran operativo en una plaza comercial del centro de Ciudad de México.

“Es una operación que tiene que ser permanente, se tiene que cumplir la ley”, afirmó el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, en conferencia de prensa. “Esto tiene que ver con favorecer, proteger a la industria mexicana y a las industrias establecidas en México y al comercio que respeta las leyes”, agregó.

En el operativo del jueves, en una de las muchas plazas del centro de la capital conocidas por la venta de todo tipo productos a precios muy bajos, se requisaron más de 262 mil productos ilegales que no tenían ni un solo documento que acreditara su entrada al país y muchas veces sin ni siquiera tenían etiquetas.

El edificio tiene carteles con caracteres chinos, igual que muchas de sus tiendas, pero, según Ebrard, los productos no solo procedían de China sino también de Bangladesh, Malasia, Vietnam e Indonesia.

El funcionario desvinculó el plan de cualquier exigencia del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, una de cuyas grandes críticas a México es que el país es utilizado por China para introducir sus productos a territorio estadunidense.

Sin embargo, su inicio tuvo lugar la misma semana que Trump amenazó a México con imponer aranceles del 25 por ciento a todos sus productos y un día después de la conversación que mantuvieron el miércoles el estadounidense y la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum.

No obstante, el titular de Economía dijo que ese primer operativo, en el que participaron 40 miembros de la Marina y decenas de fuerzas de seguridad de la Ciudad de México, se había planeado hacía semanas.

No existe ninguna evidencia de que los productos requisados fueran a ser re-exportados fuera de México. Lo usual es que este tipo de mercancías sea comprada por personas que luego las revenden en puestos de las calles y en mercados callejeros, que se multiplican en las fechas navideñas.

Ebrard aseguró que la operación llamada “Limpieza” fue una instrucción de la mandataria y que no solo irá contra los que venden esa mercancía que entró al país de contrabando sino contra las agencias aduaneras que permiten su entrada, los transportistas que la trasladan por el país y quienes rentan los locales para su venta.

Para ello, se pedirá la colaboración de la Secretaría de Hacienda, el Servicio de Administración Tributaria y de la Guardia Nacional.

En esa primera redada, las autoridades tardaron siete horas en requisar todos los productos, entre los que había un poco de todo: textiles, juguetes, falsificaciones de marcas famosas como Disney.

El inmueble quedó requisado, se interpuso una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) y se estima que el valor de la mercancía que será destruida es de unos 375 mil dólares.