México.- Pobladores de la comunidad portuaria de San Felipe, denunciaron la reanudación de trabajos para construir casas habitación en una zona de manglares que fue devastada de manera ilegal, supuestamente por autoridades de ese municipio.
Se trata de más de dos mil metros cuadrados de manglares que fueron rellenados con maquinaria y se levantaron varios pies de casa, supuestamente con permiso del Ayuntamiento de esa localidad, ubicada en la costa oriente del estado.
Esos mangles formaban parte dentro del Área Natural Protegida Reserva Estatal Dzilam de Bravo, por lo que tras comprobar el daño causado, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) interpuso una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR).
La Procuraduría interpuso la denuncia contra el síndico de esa localidad, Felipe Marrufo López por las actividades de derribo de manglar y relleno de humedal en San Felipe,
Atribuyó a Marrufo López y otras personas, a quienes no identificó, los delitos de Desmonte, tala y cambio de uso de suelo en terrenos forestales para el relleno de un humedal, actividades tipificadas como ilícitos en el Código Penal Federal.
El daño a manglares rojos, blanco, negro y botoncillo, que son especies amenazadas, es una accion que tipificada como delito en el artículo 420 del Código.
Para esos dos delitos, se establece una pena de seis meses a nueve años de prisión y de uno a nueve años de prisión, respectivamente.
Sin embargo, de acuerdo con la diputada federal del Partido Acción Nacional por esta entidad, Cecilia Patrón Laviada, quien lleva este proceso con los pobladores de San Felipe que denunciaron el hecho, hace unos días, se reanudaron los trabajos de construcción.
"Además de los pies de casa que ya se habían construido, continúan con la destrucción del mangle para calles y accesos, que no solo son un daño al medio ambiente, sino también un foco de infección”, precisó. Confirmó a Notimex ya prepara una nueva denuncia ante la Profepa contra el síndico por estos hechos.
En la entrevista aseguró que algunos de los pobladores que denunciaron y han dado seguimiento al caso, han empezado a recibir amenazas, por lo que ella buscará, de manera abierta, dar seguimiento al proceso por el daño ambiental que se provocó.
