Como todos sabemos el transporte en Juárez no es algo de lo que nos podamos sentir orgullosos, pues sus deficiencias son evidentes hasta para quienes no lo utilizan en ningún momento, pues algunas de ellas, no pocas por cierto, están evidentemente en malas condiciones mecánicas, pues emiten cantidades industriales de humo negro sin que autoridad alguna los detenga, cuando se supone que, por ejemplo, la Dirección de Ecología debería de hacerlo pero posiblemente en esa instancia están mas ocupados atendiendo animales de las calles, por aquello de que la directora de ecología, Margarita Peña Pérez, no es bióloga sino veterinaria, cosa que no está mal, pero la verdad, como que si urgen acciones más encaminadas a abordar asuntos del medio ambiente.
Recientemente los concesionarios del transporte en el estado comenzaron a mover el tema de un incremento a las tarifas que cobran, porque aseguran que, con lo que actualmente pagan los usuarios, ya no es costeable seguir trabajando, pues los insumos como las refacciones y las gasolinas o diésel se consumen prácticamente todos los días, eso en teoría, pues está visto que muchos de los accidentes que se presentan con estos camiones escolares metidos a ruteras, son porque sus condiciones físico-mecánicas, son, en algunos casos, deplorables, basta con abordarlas para darse cuenta de que hay algunas que presentan severos daños, por ejemplo en el piso con enormes agujeros, en otros casos los asientos no solo presentan vestiduras completamente destrozadas sino que están sueltas en la base que las sujeta, los pasamanos tampoco son muy seguros, mientras que en lo relacionado a su funcionamiento, en ocasiones la transmisión o parte del motor está expuesto al interior, lo que genera mucho calor para el operador y quienes están en las primeras filas de asientos, generando condiciones inseguras, además de que algunos usuarios no ayudan mucho, ya que abren las puertas de emergencia para bajarse o subirse de forma rápida a la unidad, y todo lo anterior se convierte en un peligro para los usuarios.
Y hablando de la forma en que se conducen los operadores, ni se diga, ya que algunos van a toda prisa e invaden los carriles que no les corresponden, prácticamente aventando el camión al resto del tráfico vehicular, situación que genera decenas de accidentes que dejan perdidas económicas enormes, pero además tiempo, pues se pierde todo el día nada más para que los involucrados se puedan retirar y terminar el procedimiento, pero a eso hay que sumarle otros días que se pierden por las reparaciones de los vehículos afectados, eso cuando tiene solución, porque en otros casos son pérdida total y el asunto complica más.
Por supuesto que lo más lamentable es cuando, derivado de un accidente, se pierden vidas humanas las cuales ningún dinero las puede reponer.
Finalmente el incremento a las tarifas del transporte no se han autorizados, eso está bien, lo malo es que seguimos exactamente igual que antes, es decir, los mismos camiones viejos e inseguros, choferes que manejan a la ofensiva, contaminación imparable y demás linduras. Es lo que tenemos para movilizar a la gente y que, por lo mismo, los utilizan y como vemos las cosas parece que en Juárez estamos destinados a que el transporte no cambie y esa no es la idea…