* Genialmente perverso, El Turco Plutarco Elías Calles detonó las ambiciones, pasiones, adicciones y perversiones de los jefes militares postrevolucionarios. Sin embargo, fue dinamitado por la mayor ambición del general Lázaro Cárdenas del Río, de ascendencia judía sefardí o española.

* Jorge González sentenció que el trabajo en unidad de los militantes dará el triunfo en las futuras elecciones. La Jornada de Afiliación avanza “de la mano de la militancia y los verdaderos priistas que, más que dividir, se acercan al partido para sumar esfuerzos y voluntades con su dirigencia”.

El nuevo PRI del peñato, terminó de hundirse en la derrota más que nada por las traiciones. La escandalosa corrupción, fue la chispa que incendió la reseca pradera del hartazgo ciudadano.

La mayoría de los mexicanos siguen estando hasta la madre de las cúpulas de la partidocracia. Es un terrible equívoco pensar o creer que ignoran el monopolio que ejercen las mafias familiares.

El mayor problema de fondo es que esa inmensa mayoría de mexicanos es omisa y silenciosa. Es el principal obstáculo para arribar a la normalidad democrática sin aventuras mesiánicas populistas.

Sumar en una formación partidaria las ambiciones, pasiones, adicciones y perversiones de los jefes militares postrevolucionarios, se dio gracias a la visión oriental de El Turco Plutarco Elías Calles.

Árabes y judíos tienen una visión mesiánica mundial. Son ejemplo paradigmático de nómadas globales. No tienen patria, aunque respeten La Meca,​ en Arabia Saudita, y Tel Aviv en Israel.

Usan el nombre de su Dios, Alá o Yahvé, para justificar ser el pueblo elegido. Unos y otros, han convertido al Becerro de Oro en su verdadero Dios. Manejan los centros financieros globales.

Su actitud y actuación, por tanto, es totalmente contraria a la cristiana occidental. Ello explica porque han prohijado caudillos mesiánicos, sobre todo, en los países de Hispanoamérica.

Con esa visión mesiánica de conquista mundial El Turco Plutarco Elías Calles tropicalizó en México la estructura corporativista del fascismo de Mussolini en el Partido Nacional Revolucionario (PNR).

Para ello el fascismo inculcaba la obediencia de las masas, idealizadas como protagonistas del régimen y formar una sola entidad u órgano socioespiritual único indivisiblemente hegemónico. ​

Genialmente perverso, El Turco Plutarco Elías Calles detonó las ambiciones, pasiones, adicciones y perversiones de los jefes militares postrevolucionarios, para capitalizarlas en beneficio personal.

En una acción de justicia distributiva dio a cada quien lo que quería y correspondía en función de su peso político específico: Poder político, dinero, alcohol, placer sexual con hombres o mujeres.

Sin embargo, el todopoderoso Maximato vigente de 1928 a 1934, fue dinamitado por la mayor ambición del general Lázaro Cárdenas del Río, de ascendencia judía sefardí, es decir, española.

La recuperación de la memoria histórica permite confirmar y avalar nuestro señalamiento sobre la visión mesiánica milenaria mundial que tienen árabes y judíos incluyendo, desde luego, a México.

En 1932, Pascual Ortiz Rubio renunció a la presidencia tras no soportar la injerencia de Calles en su gobierno. En su lugar es nombrado presidente interino el general Abelardo L. Rodríguez.

Mientras éste se ocupa de los asuntos administrativos, Calles lo hace de la política nacional. En esta época se modifica el artículo 3 de la Constitución para la enseñanza de la educación socialista.

En 1934 Calles impone como candidato a la presidencia al general Lázaro Cárdenas, con el Plan Sexenal. Cárdenas es elegido y Calles le impone gente de su confianza en el gabinete presidencial.

La madrugada del 10 de abril de 1936, Cárdenas, acompañado por un cuerpo militar, saca a Calles de su casa en pijama, y lo sube a un avión del Ejército Mexicano que lo llevará a California.

De esta manera Cárdenas expulsa del país a Calles y pide la renuncia de todos los callistas en su gobierno. El Turco Plutarco Elías Calles fijó su residencia en San Diego, California, Estados Unidos.

Regresó a México hasta que el presidente Manuel Ávila Camacho, al final de su mandato, le permitió de nuevo residir en el país adonde regresó gravemente enfermo a morir, resentido.

Esta amplia y detallada introducción tiene como objetivo a nuestro leal saber y entender advertir que si la afiliación del nuevo PRI no es acompañada de la depuración traerá su extinción.

La reafiliación al partido tricolor debe tener como divisa la refundación, de hecho o de derecho, volviendo a la sabiduría práctica y pragmática del espíritu de su filosofía que le dio origen.

Y ello entraña de manera necesaria y obligada que los actuales caudillos y capos de las mafias familiares de la nomenklatura cedan, negocien y concertacesionen posiciones cupulares.

A nuestro juicio, si el nuevo PRI recupera, sobre todo, permanentemente el activismo para abanderar las más sentidas causas populares podría empezar a lograr triunfos en 2021.

Obviamente es indispensable recuperar la vigencia de las reglas del juego no escritas del viejo sistema político mexicano dominado por el PRI hegemónico, a través de la disciplina partidaria.

Al mismo tiempo, se requiere recuperar el Código de Honor que sancione enérgicamente las traiciones con expulsiones públicas y cárcel a quienes incurran en acciones de corrupción.

Con el fin de fortalecer la Jornada Nacional de Afiliación y Refrendo de la Militancia, el presidente del Comité Directivo Estatal del PRI, Jorge González Ilescas, acudió a una reunión de trabajo con la líder nacional del Partido Revolucionario Institucional, Claudia Ruiz Massieu.

En presencia de sus pares de los Comités Estatales en todo el país, el líder oaxaqueño refirió que será el trabajo en unidad de todos los militantes como se dé el camino del triunfo del PRI en las elecciones que se avecinan, “aquí estamos los que queremos al partido y los que siempre vamos a dar la cara”, confió.

González Ilescas añadió que la Jornada Nacional de Afiliación avanza por territorio oaxaqueño, “de la mano de la militancia y los verdaderos priistas que, más que dividir, se acercan al partido para sumar esfuerzos y voluntades con su dirigencia”, dijo.

Durante la reunión celebrada en las instalaciones del PRI en la Ciudad de México, la dirigente nacional, Claudia Ruiz Massieu, refrendó su acompañamiento con quienes participan en el proceso que vive el partido, a quienes llamó a seguir dando paso a la unidad y diálogo que hacen del PRI un instituto fuerte y democrático.

Presentes en el encuentro con la dirigencia estuvieron los delegados del Comité Ejecutivo Nacional en cada uno de estados, así como el secretario general del CEN, Arturo Zamora Jiménez, quien coincidió que la fuerza del priismo se cimenta en el acuerdo y la unidad.

Detrás de la noticia

Alfredo Martínez de Aguilar

[email protected]

[email protected]

@efektoaguila

Las opiniones emitidas en esta columna son responsabilidad de quien la escribe y no reflejan necesariamente la línea editorial de este medio.

Compartir:
Publicidad
Enlaces patrocinados