En los últimos días hemos visto con preocupación cómo los tiempos de espera en los puentes internacionales se han visto severamente incrementados, pues de 45 minutos a una hora que era el tiempo promedio en cualquiera de los cruces, pasó a más de tres horas y eso en el mejor de los casos, pues en situaciones extremas hay gente que reporta demoras de hasta 5 horas para cruzar; pero el daño no solamente se centra en la población civil, sino que las maquiladoras la están pasando mal y de malas, pues no se puede cumplir con la certificación “Just in time” o justo a tiempo y por lo mismo les pueden aplicar sanciones que van de los 25 mil, hasta los 100 dólares, por cada entrega fuera de tiempo y eso podría provocar, de persistir el problema, en el retiro de algunas plantas por que no tendrían los márgenes de ganancias adecuados, o al menos, que tenía planeado obtener, y eso seguramente ya no les seria costeable.
Hay que recordar que la industria manufacturera representa más del 70% de la actividad económica en nuestra ciudad, de modo que, si alguna de estas decide retirarse, las consecuencias se resienten de forma inmediata, sobre todo los trabajadores, pero también todos los negocios que subsisten alrededor de las mismas, que también se cuentan por cientos, de donde a su vez dependen más trabajadores, es decir, se trata de un efecto dominó y mientras la federación no se dé cuenta, voluntaria o involuntariamente, de todo el problema que se está generando con la entrada sin ningún tipo de control a miles de centroamericanos, o más bien dicho a migrantes; el problema no se va a solucionar, lo malo es que todo indica que no se tiene esa intensión, pues la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, insiste en que no son un gobierno represor, y no van a impedir la entrada de más migrantes a nuestro territorio; mientras, los reclamos en redes sociales no se han hecho esperar, pues hay quienes opinan que todo ese apoyo y recursos que se invierten en los migrantes, se deberían de canalizar a los nacionales, brindándoles oportunidades de trabajo y apoyos que les permitan generar otras fuentes de empleo.
Mientras los daños son de muy diversa índole, pero sobre todo esta trastornando la vida a los fronterizos, al no poder cruzar de forma normal con los tiempos regulares rumbo a El Paso Texas, y si esto de la migración va a ser permanente, como afirmó Sánchez Cordero, ya nos vamos componiendo, pues hay que recordar que después de los atentados a las Torres Gemelas del 11 de septiembre de 2001, los tiempos de espera en las filas de los cruces internacionales se incrementaron y nunca regresaron a lo que anteriormente teníamos, que incluso se podía predecir, dependiendo de la hora del día, más o menos hasta donde llegaban las filas, pues era bastante regular, pero después de la fatídica fecha, ya nada fue igual.
Esperemos que no se repita la historia y que no estemos frente a un nuevo incremento que se quede así de aquí para adelante, insisto, porque ya nos dijeron de parte del gobierno federal que este fenómeno migratorio va a ser permanente y esa no es la idea…