En el tema de la famosa Guardia Nacional, que estaría integrada por personal del Ejército Mexicano y la Marina Armada de México; como que “se les está haciendo bolas el engrudo” a los funcionarios del gobierno federal, pues el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, dijo en días pasados que, si no se hacen las reformas a la Constitución para crear esta nueva fuerza, los militares regresaran a sus cuarteles; esto se puede interpretar como que se trata de solo el cambio de membrete del Ejército, pues se supone que este cuerpo no debe estar en las calles del país, a menos, que se estuviera atravesando por una guerra, y como eso de llamar “guerra contra el narco”, a la estrategia de enfrentar al ejército contra el crimen organizado, le costó a su iniciador, el ex presidente Calderón, la condena de buena parte de la población, pues en ese intento, dejó miles de muertes durante todo su sexenio y lo más lamentable es que el resultado fue; más violencia aunado a que los delincuentes siguen en las calles, por ende, nadie quiere repetirlo, al menos en apariencia, dado que en resumen no se ganó nada y por el contrario muchas vidas se perdieron sin ningún sentido.

Mientras, en el sexenio que acaba de concluir encabezado por Enrique Peña Nieto, se siguió con la misma tónica y los resultados fueron los mismos; más muertes y nada que se logró controlar a la delincuencia organizada, pero ni la desorganizada, pues con toda esa confusión, hubo personas que no se dedicaban a delinquir pero como vieron que no pasaba nada, decidieron también entrarle a eso de la transgresión a las leyes.

Por lo anterior es que ahora se pretende mantener a las fuerzas militares en las calles, pero con otro nombre, al menos es lo que se entiende, pues lo único que van a hacer es crear este nuevo cuerpo de seguridad, integrado completamente por elementos militares y otros que básicamente tienen formación castrense.

Como juarenses seguramente no se nos olvida la forma en que los militares actuaron contra la población, claro con sus honrosas excepciones, y la verdad seguramente nadie quiere regresar a esos escenarios, lo malo es que como no hay suficiente vigilancia y combate a la delincuencia en Juárez, estamos advirtiendo que vuelven a presentarse las extorsiones a los dueños de algunos negocios y posiblemente por lo mismo, la quema de establecimientos se está registrando, con el consecuente temor de parte de la población para dejar de invertir en el arranque de una nueva empresa, y con eso en mente, no suena nada agradable saber que lo único que aparentemente están tratando de hacer los nuevos funcionarios que están bajo el mando de López Obrador, es bautizar a un cuerpo de militares con el nombre de Guardia Nacional, pero en esencia la formación es castrense.

Y como lo he mencionado ya anteriormente, no se trata de hacer lo mismo y solo cambiarle la imagen, pues al final de cuentas la población se va a dar cuenta del engaño. Por más que repitan que no es así, la realidad siempre se impone y tarde o temprano todos nos daremos cuenta de que la Guardia Nacional no es otra cosa que, soldados con distinto uniforme y esa no es la idea…

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