Últimamente se ha dado mucho énfasis a proteger a los animales domésticos, incluso hemos visto cómo se han aplicado sanciones para quienes maltratan a sus mascotas, también se han documentado sanciones para, por ejemplo, quienes utilizan un burro o caballo para jalar un carro en el que recogen fierro viejo o vende algún tipo de mercancía en las colonias; se prohibieron los espectáculos con animales en los circos a nivel nacional, aduciendo a que para adiestrarlos, reciben severos castigos; se crean organizaciones no gubernamentales que se dan a la tarea de recoger, sobre todo, perros de las calles a los que se les provee de salud, alimento y cobijo en lo que se ponen a disposición de quien quiera adoptarlos; también es cada vez más evidente que hay grupos de gente que está en contra de las corridas de toros, precisamente con el propósito de prevenir el maltrato que se les da a los toros de lidia hasta darles muerte, pues aseguran que se trata de un espectáculo en el que se hace sufrir a un ser vivo, mismo que, dicen, no es bravo por naturaleza, sino que se comporta de forma muy dócil si se la da el trato adecuado.

Y la verdad cualquier maltrato es incorrecto, sin embargo en el caso de la fiesta brava, se trata prácticamente de un ritual que tiene una serie de elementos que le dan ese misticismo, al menos eso dicen los conocedores, también es evidente como en redes sociales mucha gente prácticamente lincha mediáticamente, a quien maltrata a un animal pese a que no se sepa el porqué de la agresión de una persona hacia un animal, pues no se conoce si la persona se está defendiendo de un ataque de un perro o un gato y solo se ve cuando el sujeto se defiende, pero eso no lo ven los animalistas y se van a la yugular.

Hay gente que llega a agresiones muy violentas contra quien considera que es un maltratador de animales y hasta justifican estos actos que son igual o más reprobables; con esto quiero resaltar como se tiene ahora una conciencia muy fuerte en torno a la defensa de los animales y estoy completamente de acuerdo con eso, sin embargo la duda que me surge es ¿Dónde están esos defensores de los derechos de los animales cuando se abre la temporada de caza?, pues nuestro estado junto con el resto, tiene fechas específicas en que permite que quien se divierte matando, desde conejos, palomas, pavos salvajes, y toda fauna silvestre que exista, dependiendo del lugar de que se trate, lo hagan con un permiso expedido por la propia autoridad, y nadie dice algo, de hecho es una actividad que goza de mucha aceptación, cosa que me parece incongruente sobre todo en estos tiempos. No sé si quien defiende a un perro o a un gato del maltrato o incluso a los toros, no ve nada de malo en que alguien con un arma de fuego salga a matar los animales anteriormente enumerados, en una clara desventaja de uno frente al otro, pues se trata de un individuo pensante que porta un arma frente a un ser desprovisto de toda defensa al que incluso se le toma por sorpresa para que no salga corriendo, que es, en la mayoría de los casos, su único sistema de defensa.

Y la verdad en el caso de los perros y los gatos para nada están en el más mínimo peligro de extinción, cosa que no sucede con la mayoría de los animales silvestres y de todas formas, las protestas no se ven por ningún lado, mientras la cacería se da todos los años y no sabemos, al menos no se da a conocer, qué tanta gente la práctica y cuantos ejemplares mueren a manos de gente que gustosa sale a practicar el tiro al blanco con animales que forman parte del ecosistema de nuestra entidad y esa no es la idea…

Compartir:
Publicidad
Enlaces patrocinados