Recientemente se dio a conocer un estudio realizado en Australia, que supuestamente confirma que las personas mayores de cuarenta años de edad. no deben trabajar más de tres días porque su rendimiento laboral ya no es el mismo. Para el estudio se analizó la memoria, el razonamiento, bienestar, salud, entre otros factores que influyen en quienes ya están o pasan de los 40.

Resulta que en un grupo en el que solo incluyeron gente que ya había llegado, como dicen, al cuarto piso, analizaron su rendimiento durante 25 horas de trabajo y notaron que este descendía de forma notable, y aunque para algunos eso suena muy bien, pues lo ideal sería que a partir de esa edad las jornadas laborales se redujeran de forma notable, la verdad es que este hallazgo perjudica más de lo que pudiera beneficiar, pues los reclutadores muy posiblemente pondrían un tope a la edad para recibir nuevos empleados a los 35 como máximo, pues de ahí para adelante, el rendimiento ya no sería el mismo, por mucha experiencia que tenga el prospecto. Eso de que baje su rendimiento apenas a los tres días de trabajo, como que no es algo atractivo para ningún dueño de negocios, incluso si por ejemplo, uno mismo pensara en algún momento emprender una empresa, el hecho de saber que la gente arriba de 40 trabaja muy bien, pero solo 3 días a la semana, no resulta nada atractivo.

Y aunque nos digan que existen países en los que las jornadas laborales llegan a un promedio de 28 horas semanales, comparadas con las 40 de nuestro país y el de los Estados Unidos, la realidad es que muy seguramente nuestra economía no está preparada para un cambio de forma inmediata, claro que no se podría descartar como un plan a mediano o largo plazo, como una forma de beneficiar a los empleados de todo tipo de labor.

Hay que recordar que el empresario mexicano Carlos Slim, quien se ubica entre los hombres más ricos del mundo, ya en anteriores ocasiones ha mencionado que sería ideal que las jornadas laborales se redujeran a tres días por semana, argumentado mayores niveles de productividad y desempeño, ya que les daría tiempo a los colaboradores de toda empresa el poder disponer de más tiempo para convivir con su familia y amigos, pero ni él –Slim- con todos sus millones de dólares lo ha puesto a prueba, cosa que podría, pues no existe ley alguna que se lo impida, de hecho según sus propios empleados, ocurre todo lo contrario en los negocios del magnate mexicano, quienes aseguran que les exigen jornadas largas de trabajo por el mínimo, es decir, por un sueldo normal y en ocasiones debajo de lo normal, o convencional, así que se ve lejos que se pudieran dar esa reducción de las jornadas de trabajo y menos porque nuestros vecinos no lo están haciendo, ya ve que lo que hagan los estadounidenses es lo que después de un tiempo trataremos de intentar en México, pero por lo pronto saber que supuestamente baja el rendimiento de los empleados al pasar la edad de los 40 años, no nos favorece en lo más mínimo y esa no es la idea…

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