La semana pasada se celebró el Día Mundial del Agua por lo que los medios e instituciones dieron a conocer información sobre como andamos en ese tema y la verdad, es que los que tenemos el privilegio de no carecer del mencionado elemento, no la valoramos, pues es común ver cómo, de muy diversas formas, esta se desperdicia sin el más mínimo asomo de angustia, y es que como afortunadamente no hemos padecido su escases, simplemente nuestro subconsciente piensa que así va a permanecer por siempre, sin embargo eso es completamente falso, pues todo tiene un limite y en Juárez estamos llegando a él.

De acuerdo con la organización Worldwaterday.org. En el planeta, 2 mil 100 millones de personas viven sin agua potable en sus hogares, 159 millones de personas recolectan el agua de estanques o arroyos, a falta de un adecuado sistema de distribución.

Mientras que México tiene 471.5 mil millones de metros cúbicos de agua dulce renovable por año que se divide en el 76 % para la agricultura, el 15 % para uso público, 5 % para la producción de energía y el 4 % para abastecer a la industria.

El uso público del vital líquido se reparte entre los 124 millones de personas de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que viven en México, de los cuales, 11 millones no tienen acceso al agua potable.

Cada mexicano consume diariamente 360 litros de agua potable, tanto para tomar, y sus necesidades más básicas, como el aseo personal, del hogar, auto, entre otros aspectos de la vida cotidiana, no obstante, en las zonas de nivel económico alto, el consumo se eleva a 600 litros de agua diariamente; mientras en las zonas consideradas de bajo nivel económico el consumo, es de tan solo 20 litros.

En el país, más de 13 mil millones de metros cúbicos de aguas residuales se vierten anualmente sobre los cuerpos de agua dulce, es decir, sobre lagos y ríos. El 70 % de agua dulce está afectado por la contaminación y el 31 % se describe como extremadamente contaminado. Las descargas constantes y “permitidas” son las principales fuentes de contaminación.

En fin, los datos y estadísticas que ofrece la referida organización nos confirman la forma en que todos desperdiciamos el agua o la contaminamos, dando al traste con el vital liquido que existe en ríos y lagos y que bien se podría utilizar sin darle tanto proceso como se hace actualmente para poder hacerla perfectamente consumible.

En nuestra ciudad algunos expertos en el tema afirman que en este momento, se estima que no tendremos problema con el abasto de agua por unos treinta años más, eso si seguimos con los mismos patrones de consumo, pero en caso de que se incremente, el tiempo podría disminuirse de forma importante.

Hay que agregar que como se están agotando nuestras fuentes de abastecimiento, el vital elemento se debe extraer a mas profundidad, lo que significa que es agua con altos niveles de minerales, por lo mismo se necesitan de procesos mas complicados que le den la aptitud para el consumo humano, de otra forma serie toxica, provocando todo lo contrario que aporta el agua a todo lo que toca, que es vida.

Por todo lo anterior es sumamente importante que tomemos conciencia de los momentos en que, sin darnos cuenta, la desperdiciamos, para dejar de hacerlo, al final de cuentas cuidar el agua es responsabilidad de todos, al menos esa es la idea…

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