“Me levanto diariamente a las cinco de la mañana, desayuno carbohidratos complejos, me voy al gimnasio, hago una rutina de tres horas en aparatos, posteriormente 20 minutos de ejercicios tipo cardiovascular y luego, solo después de esto, comienzo mi día ‘normal’, en que tengo que comer cada 3 horas para mantener alimentado óptimamente mi cuerpo”, me explica con detalle.

Cada día, durante los 3 meses antes de una competencia, Emma realiza religiosamente este sistema de vida que le prepara para competir, ¿el resultado? Un físico espectacular que le ha llevado a ser la ganadora del primer lugar internacional de la Copa Esmeralda 2018 en Bikini Wellness Principiantes de la International Federation of Bodybuilding and Fitness, celebrado en Cancún, Quintana Roo.

Emma Gutiérrez, joven juarense que en este año ganó el primer lugar en su categoría en la competición local, el tercero en la estatal y el quinto en la nacional, sorprendió a propios y extraños al coronarse con el primer sitio en la competencia internacional.

Esta chica, seria pero simpática, estudiante de sexto semestre de Ingeniería Biomédica, me cuenta que cuando era niña, su familia asistía regularmente a las competencias de fisco culturismo en apoyo a un tío, hermano de su mamá, que participaba en ellas llegando a ser Mister México a principios de los 2000, pero en aquel tiempo, reconoce que ese ambiente no le llamaba la atención.

Su mamá, amante del ejercicio, intentó acercarla a dicha práctica también, pero como no le gustaba madrugar, solo acudió a algunas clases de zumba y abandonó la práctica.

No fue sino hasta comenzando la adolescencia que la vanidad de Emma despertó y la sola idea de tener celulitis en las piernas movió toda su resistencia al ejercicio y le pidió a su tío que la entrenara en el gimnasio y, aunque la idea de hacer dietas especiales aún no era parte de sus planes, al menos el ejercicio sí.

Al concluir la preparatoria, su tío, ahora entrenador, consideró que ya estaba lista para iniciarse en el mundo de las competencias y reconoce que hizo algo de trampa en la alimentación y a ello adjudica el no haber ganado, cosa que la deprimió mucho, pero aprovechó ese sentimiento para comprometerse con la disciplina necesaria que para triunfar en este mundo, es un valor indispensable.

En la siguiente competición, Emma realizó una mejor preparación, pero por error la inscribieron en una categoría diferente y perdió, en esta ocasión, decidió retirarse por un año de ese ambiente.

Emma me explica que existen tres categorías en el mundo femenino de la competencia en físico constructivismo: bikini (cuerpo marcado muscularmente pero estilizado), bikini wellness, la categoría de Emma (cuerpo musculoso con especial énfasis en la parte inferior) y fitness figura (cuerpo altamente musculoso en la parte superior del cuerpo con una estética más angosta en la parte inferior).

A mediados de 2017 y tras cambiar de entrenador, toma la determinación de retomar su entrenamiento para competencia y en enero de 2018, estaba ya colocada en el primer lugar del ranking juarense.

Me impresiona de sobremanera que en periodo de menos de un año, haya llegado tan lejos.

¿Qué sigue en la carrera de Emma? lo tiene muy claro: “Ya soy campeona internacional en nivel principiante, voy a tomar 2019 de descanso en competencia, para poder dedicarle más tiempo a la escuela e incrementar la masa muscular de mis piernas, ya que en 2020 voy a buscar el conseguir nuevamente el primer lugar internacional, pero ahora en nivel novata o de ser posible, brincar a nivel clasificado, que es el más avanzado; quiero también obtener mi pro card (que es un carnet que la acredita como atleta profesional, lo que la integra a un círculo de competencias diferente) y quiero ingresar al circuito de competición de Estados Unidos en 2021/2022”.

Llegar a tener un cuerpo con el nivel de perfección como el que Emma tiene hoy en día es una labor titánica que requiere de disciplina “en verdad nunca pensé que pudiera tener tanta” me confiesa, también se requiere de constancia y mucha concentración.

Pero, ¿cualquiera podría hacerlo?, yo no estoy muy segura de ello, pero ella sonriendo me dice que sí, que cualquiera puede esculpir su cuerpo a su gusto, es cosa de comprometerse, “a menos de que tengas una enfermedad cardiovascular o problemas de diabetes, lo que te dificulta las cosas, todas las demás personas pueden hacer físico culturismo de manera exitosa, solo necesitan fuerza de voluntad y un buen entrenador”, le expreso mis dudas y solo ríe y acota: “sí se puede, te lo aseguro”.

Al verla, me asalta una duda, una mujer con ese cuerpo, ¿sufre acoso? la respuesta me asombra, “en el medio atlético, no, al contrario, es admiración ante la obra de arte que se logra con el cuerpo, sin morbo, puedes estar tranquila en bikini, es un ambiente seguro, aunque no puedo negar que en la calle, vestida completamente normal, es donde si te topas con momentos de acoso, pero yo soy muy bronca y de inmediato pongo en su lugar a quien se atreve a faltarme al respeto, no puedo evitarlo”.

Quiero saber si se ve a sí misma como entrenadora en el futuro y contundentemente me responde que no, que se proyecta a largo plazo ejerciendo su carrera y poniendo al fisicoculturismo en un segundo plano, “en dos años seré Ingeniero Biomédico, y a eso pienso dedicarme el resto de mi vida, es algo que me apasiona”.

Le pido algunos consejos para quien quiera cultivar su cuerpo en esta disciplina y me sugiere, de entrada: “no poner pretextos para hacer la dieta indicada, que es en lo que todo mundo falla, por ejemplo, a mí me encantan las donas, pero no debo comerlas, entonces, me conformo con disfrutar su aroma, se burlan de mí, pero eso hago con lo que no debo comer, lo huelo, nadie me obliga a llevar una dieta, lo hago por gusto, así que ¡me satisface olfatear lo que no puedo comer!”.

En cuanto a la rutina ideal, recomienda trabajar por grupos los músculos, para que funcione mejor el trabajo y la sugerencia es: “lunes, miércoles y viernes, pierna y abdomen. Martes, jueves y sábado, pantorrilla. Martes, hombro y bíceps; jueves, espalda y tríceps y sábado, pecho, es la combinación perfecta”. Y después de ver los resultados, la verdad es que estoy pensando seriamente ponerla en práctica.

Publicidad
Enlaces patrocinados