México.- Gracias a una biografía escrita por su hermano Rodolfo titulada ‘Julio César Chávez: La verdadera historia’, se dio a conocer que el ex pugilista mexicano, considerado por muchos como el mejor en la historia de nuestro país, inhaló cocaína en el mismísimo baño de Juan Pablo II.
En su visita a la Ciudad de El Vaticano, el ‘César’ suplicó que le consiguieran una charla con el pastor de la Iglesia, y al visitarlo, el Santo Padre recibió al boxeador azteca.
“Bienvenido Julio César, es un honor para mí que me honres con tu visita, hijo”, le dijo Juan Pablo II.
Luego, el mexicano pidió recorrer el lugar y al llegar a la habitación del Papa, entró al sanitario para inhalar la droga que le dio su hermano que justamente envolvía en su pantalón con un papel.
“Discúlpame, Diosito”, interiorizó JC antes de realizar aquel acto.
“La distribuyó sobre el mármol para después inhalarla, dejando completamente limpia el área del lavamanos. Julio jaló la palanca del excusado para que pensaran que entró al baño por otra cosa”, relató Rodolfo.
