Ciudad Juárez.- ¿Te imaginas estar agitando durante una hora una garrafa de nieve? Sólo personas con amor al arte lo hacen, tal es el caso de Pablo Sánchez, originario de Xochimilco, que desde hace más de 30 años se dedica a la elaboración de nieve de garrafa, helado 100% artesanal.

Fue en diciembre del 2006 que el artesano emprendió un viaje a Juárez, enamorándose de la ciudad y su gente; por lo que en verano del 2007 decidió junto a su familia abrir las ahora ya famosas “Nieves de la Jilo, paisajes y recetas de Xochimilco”.

Nieves auténticas de garrafa, hechas a mano como en la antigüedad se hacían. Detrás de su creación se encuentra la emoción y sentimiento que Pablo les deposita “mi forma de ser está en ellas, trato de hacerlo lo mejor que pueda”.

Cariño, la clave del éxito

Paciencia y cariño han sido la clave del éxito en su negocio, y es que de acuerdo al hombre no cualquiera tiene la capacidad de hacerlo, pues su elaboración manual y por lo tanto artesanal, implica mucho esfuerzo.

“Yo siempre estoy al frente del puesto, no hay personal que atienda como uno mismo, siempre me ha gustado hacer la nieve, es un trabajo muy rudo que no cualquiera le entra, requiere de mucho esfuerzo”, asegura.

Junto a Pablo trabaja su esposa y su hija Paulina, quien describe como un orgullo trabajar en las nieves y más hacerlo al lado de su padre.

“La verdad siempre ha sido un orgullo desde chiquita trabajar en las nieves, siempre me ha gustado”, añadió que durante dos años su papá se retiró de la venta y ella le pedía que regresara, por lo que cuando sucedió la noticia la llenó de gusto y felicidad.

Por su parte el hombre relata que en su llegada a Juárez todo fue novedad, pues los sabores de nieves que ofrece no son muy conocidos en el norte, por lo que su misión desde el día uno ha sido llevar al paladar de sus clientes una delicia auténtica.

Sabores para todos los gustos

En las “Nieves de la Jilo” puedes disfrutar de los sabores más típicos y refrescantes, como limón, mango, tamarindo, guanábana, nuez, pistache, cajeta con nuez, coco, pero también hay sabores inusuales como, nopal, aguacate, tuna, mamey, tequila, velo de novia, fresas con crema y sexo en la playa, además de sabores de marcas de golosinas como gansito.

Los sabores más pedidos son de queso y beso de ángel, esta última está hecha muy al estilo de la familia Sánchez, pues se plática que dado a que no consiguieron la fruta que en su origen lleva, tuvieron que hacerla con frutos rojos “se quedó así ya no pudimos cambiarla, a la gente le gustó”.

Proceso de elaboracíón

La nieve de garrafa se prepara al interior de un recipiente de acero inoxidable, el cual se acomoda dentro de una barrica de madera, el espacio que queda entre estos se rellena de hielo y sal de grano. Una vez combinados los ingredientes el nevero gira la garrafa constantemente hasta que la nieve se espese. Dependiendo del sabor puede tardar desde 40 minutos. Se dice que el secreto de una buena nieve de garrafa es la sal y el modo de agitarse la garrafa.

Hacen más de 10 litros de nieve a la semana y revelaron que, sabiéndola conservar, puede durar hasta tres días, pues si se deja más tiempo comienza a tomar consistencia de raspado.

Para Pablo lo único que pudiera diferenciarlo del resto de vendedores de nieve, es la pasión con la que las prepara, pues asegura que “cada quien su estilo y su forma de hacerlas”.

Clientes se amontonan

Sus clientes acuden de distintos sectores de la ciudad hasta su local, ubicado en la avenida Centeno, intersección con la avenida Manuel J. Clouthier (Jilotepec) para saborear un poquito de esta tradición.

“Pasar por la Centeno y no hacer una parada obligatoria en estas nieves, es como pasar por Villa Ahumada y no comprar burritos”, agregó uno de los clientes que en el momento de la entrevista se bajó de su automóvil para comprar un helado.

Respecto al clima extremista que se tiene aquí, Pablo asegura que este ha sido “maravilloso” e ideal para vender nieves, pues bien sabemos que hay días bajo el sol que lo único que pensamos es en refrescarnos, por lo que de ahora en adelante lo primero que se te vendrá a la mente son estos helados artesanales y lo mejor es que los puedes comer a diario.

“Nieves de la Jilo, Paisajes y recetas de Xochimilco”, abren los siete días de la semana en un horario de 11:00 a.m. a 7:00 p.m.

Cabe mencionar que han participado en eventos locales como la Fiesta Juárez y Expo TlaquepArte, recibiendo a miles de personas por día.

Para finalizar, Pablo invita a la comunidad juarense a probar y degustar la calidad de nieve que hacen, esperando también se enamoren de todos los sabores que manejan.

“No se queden con las ganas de probar estas ricas y deliciosas nieves”, concluyó.

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