Ahora resulta que según el presidente Donald Trump, sin una barrera física entre su país y México; Estados Unidos dejará de existir como nación, esto lo declaró luego de conocer los ocho prototipos de muro que le fueron presentados dentro de los planes que se tienen para amurallar la unión americana, cosa que fue parte de lo que prometió durante su campaña a la presidencia.

El mandatario recalcó que en México hay muchos problemas y tenemos los carteles de las drogas, a los que aseguró, su gobierno, los está combatiendo como nadie lo había hecho, incluso aseveró que el combate es duro.

Mientras que en la misma presentación el jefe de la Patrulla Fronteriza en San Diego, Rodney Scott, dijo que estaba de acuerdo con la barrera pero que la misma debe permitir ver lo que pasa del lado mexicano y agregó; “tenemos grandes socios en México, con las agencias policiales, y les puedo pedir ayuda, pero no tengo la oportunidad de saberlo si no los puedo ver”.

Así que la insistencia de un muro que separe nuestro país de los vecinos del norte sigue en pie y para tratar de convencer a la mayoría de la población, su presidente se vale de argumentos incluso que resultan no muy inteligentes, pues no puede ser que un país tan poderoso como Estados Unidos dependa de una simple barrera física, ya que, primero el tan mencionado muro tiene años que está en construcción, de hecho apenas hace un par de meses se concluyó con una de las partes que se ubica en la zona de Anapra, incluso la obra representó empleos para algunos mexicanos y la oportunidad de generar ingresos para familias de la zona quienes les vendían alimentos preparados, refrescos o algunos otros artículos a los trabajadores que todos los días acudían a laborar, por lo mismo mucho de lo que el mandatario estadounidense afirma no es verdad, lo que sí, es que posiblemente cambiará de proveedor, puesto que son distintas empresas constructoras las que le presentaron las muestras de cómo se vería el muro.

Pero a lo anterior debemos agregar que la lucha contra los carteles la están librando las autoridades mexicanas, mismas que continúan aplicando una fórmula que ya se sabe que lo único que deja son miles de muertes al año, algunas efectivamente de narcotraficantes, pero muchas otras víctimas inocentes que se cuentan como daños colaterales a un enfrentamiento sin razón; mientras que del lado americano las adicciones siguen sin poderse controlar, llegando a situaciones en que mucha gente ya ve el consumo de drogas como normal y solo es cuestión de cuidarse de la autoridad que no les vaya a detectar las dosis que llevan para consumo personal, eso sin mencionar las ciudades en donde ya está permitido el consumo recreativo de la marihuana, situación que no ha mermado tanto la venta clandestina de la misma hierva.

Así que sariá bueno que las autoridades de los Estados Unidos comenzarán a aplicar programas tendientes a disminuir el consumo interno de drogas y que no nada más se dediquen a cobrar impuestos a quienes gustan de la marihuana, pues eso es lo único que han logrado con la autorización del uso recreativo y médico, ya que en cuanto a los niveles de consumo los números no cambian mucho, o si han cambiado eso no lo dan a conocer, únicamente los millones de dólares que han conseguido recaudar vía impuestos, además de que quienes consiguieron las primeras licencias para expender la mencionada droga lograron ganancias millonarias en muy poco tiempo, lo que provocó que también esas licencias subieran considerablemente de precio

En fin, el famoso muro de Trump parece que se le concibe como la solución a muchos de sus problemas, pese a que este ya existe en buena parte de la franja fronteriza y aun así no se ve mejoría, y seguramente con las nuevas barreras que van a instalar, las cosas seguirán igual y esa seguramente no debe ser la idea…

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