Los ahorros que supondría la apertura total del mercado de combustibles, en nuestro país, en realidad no fueron tal, pues en los lugares donde ya existen estaciones de servicio de franquicias distintas a PEMEX, en lugar de disminuir sus precios, los subieron a partir de los primeros días de este 2018, y es que según una nota publicada por el periódico El Universal en las gasolineras de Satélite en la ciudad de México, tenían varias opciones para elegir, lo malo es que todas más costosas que antes de la mencionada apertura de precios, incluso la nota califica esto como la guerra de precios, desafortunadamente las opciones se reducen a más costosas que en 2017, pues mencionan precios que llegan hasta los 19.05 pesos por gasolina Premium, mientras que apenas el año pasado la misma gasolina tenía un precio de 18 y centavos, esto al interior del país porque en Juárez afortunadamente gozamos de un apoyo a los gasolineros de parte de la Secretaria de Hacienda y Crédito Publico, (SHCP) que les permite ofrecer los combustibles por menos dinero; de todas formas no sale muy económico que digamos, pero algo es algo, ya que estamos hablando de diferencias en promedio de 3 pesos menos que en el resto de territorio nacional y eso sí es bastante, sobre todo si se considera que los tanques de gasolina más pequeños son de aproximadamente 30 litros, por lo que de llenarlo se estarían pagando 90 pesos menos que en el resto del país y esa cantidad ya marca una notable diferencia, y eso en los tanques pequeños porque de los 60 y hasta 120 litros el ahorro es todavía mayor, así que definitivamente somos afortunados, aunque en la realidad los costos de los combustibles todavía deberían ser más bajos tomando en cuenta que como fronterizos tenemos la opción de acudir a las estaciones de servicio de El Paso Texas y llenar el tanque de gasolina de muy buena calidad, y en ocasiones por menos dinero.

Pero regresando a los supuestos beneficios de la liberación de los precios de los combustibles, lo lamentable es que los empresarios del ramo, algunos como que ya saben que los consumidores mexicanos aguantamos mucho, pues de otra forma no se puede uno explicar cómo es que, si están en un mercado de competencia, pretenden ganarse al cliente con precios más elevados que hace apenas unos días, da la impresión que estos empresarios estaban nada más a la espera de que se liberaran los precios de los combustibles para subirlos, dando a cambio nada más un logotipo de gasolinera extranjera y solo eso, que no es gran cosa porque el producto sigue siendo el mismo, pues aún no está permitida la importación de gasolina, así que el proveedor sigue siendo PEMEX, por lo que la calidad es la misma nada más con otro nombre y la verdad no se vale que, como en el resto del país no existe alternativa alguna más que cargar combustible donde lo vendan, resulta un abuso de parte de los empresarios gasolineros.

A lo anterior debemos sumar que la expectativa ante tal apertura era la de conseguir mejores precios con combustibles de mejor calidad, pero resultó todo lo contrario y por lo pronto no se sabe hasta cuándo se podrá ver que en un país como el nuestro, rico en hidrocarburos, precios verdaderamente bajos en comparación con los mercados internacionales, puesto que, uno pensaría que debido a que el petróleo nos pertenece deberíamos de gozar al menos de esa ventaja pero no es así, y como van las cosas ni serán, pues ahora ya ni siquiera podemos afirmar que, el también conocido como oro negro, pertenece a los mexicanos o al menos esa debería ser la idea…

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